Muchas personas sienten verdadero miedo con el simple hecho de pensar en ir al dentista.
Hay que tener en cuenta que muchos de estos temores podían estar justificados en otra época cuando las técnicas e instrumentos estaban menos desarrollados que hoy.
Esta fobia al odontólogo puede tener diversos orígenes, el más común suele ser una mala experiencia anterior o escuchar de familiares o amigos cercanos sobre malos ratos pasados en el dentista.
Lo más importante es que este miedo o fobia al dentista no nos impida acudir a la clínica dental a revisarnos o a realizar los tratamientos que sean necesarios.
Por eso te dejamos algunos trucos para vencer la odonto-fobia o hacerla más llevadera:
¿Cómo vencer el miedo al dentista?
- Escoge bien la hora de tu cita; hay estudios que aseguran que el hecho de hacerlo a primera hora de la mañana evita que estemos todo el día pensando en ello.
- Plantea todas tus dudas y miedos al dentista antes de empezar el tratamiento e indícale tu situación, él sabrá cómo actuar; incluso puedes pedirle opciones de medicación o de sedación (nunca te auto-mediques). Acuerda un gesto con tu dentista para que le trasmitas tu incomodidad en un momento determinado.
- Escoge, para empezar, la parte más sencilla de tu tratamiento, como puede ser una limpieza, te ayudará a romper el hielo con la situación y darte cuenta de que si puedes.
- Acude a la clínica dental con un amigo o familiar que no tenga miedo al dentista para que te distraiga durante los minutos anteriores y así relajarte antes de hacer el tratamiento.
Durante el tratamiento, respira de manera profunda y pausada; esto ayudará a que tus músculos se relajen y la experiencia te sea menos incomoda.